Viernes 11ª semana DA - HORARIOS DE MISAS
Acumular dinero, codicia, ambición es totalmente prohibido para un seguidor de Jesús.
Hoy estamos amenazados como nunca por la codicia.
El capital financiero está acumulado de una manera escandalosa, causando estragos: muerte de inocentes, éxodo de refugiados y migrantes que mueren en mares y desiertos.
Jesús nos invita a acumular bienes del cielo. Esos bienes del cielo son las bienaventuranzas. Tener corazón de pobre, acumular misericordia, amontonar prácticas para constituirnos en defensores de la justicia, acumular compasión, almacenar herramientas para construir la paz, inundar el corazón de limpieza interior sin corrupción.
Esos son los bienes del cielo. No hay nada que los destruya. No hay ladrones que los puedan asaltar. Esa acumulación se convierte en reparto de vida, son bienes que se entregan en favor de los sufrientes de la historia.
Cuando más se entregan más crecen y esa acumulación del cielo genera un mundo según el corazón de Dios
A propósito del mensaje de Francisco para la V Jornada mundial de los pobres